Este miércoles 25 de agosto, Black Widow, la primera película en la Fase Cuatro del Universo Cinematográfico de Marvel, llega a Disney+ para todos los suscriptores de la plataforma sin costo adicional.
Con un despliegue de producción en tres continentes y 64 sets de filmación, la cinta protagonizada por Scarlett Johansson, embarca a la audiencia en un viaje visual único del que vale la pena conocer más.
Una espía Trotamundos
La producción de Black Widow empezó en el verano europeo de 2019 y duró 87 días. Las escenas en locaciones de la película se filmaron en distintas ciudades de Reino Unido, Noruega y Marruecos, así como en Budapest y Atlanta.
El coproductor Brian Chapek cuenta que los realizadores querían que la película se sintiera vasta y mundana para reflejar la historia de Natasha.
«Como es una película de espías trotamundos, era importante que ubicáramos a Natasha en entornos del mundo real, lugares que eran imposibles de imitar en el plató de exteriores. Era importante, para lograr esa sensación de realidad, ir a muchos de estos lugares y filmar allí«, explica.
A su vez, el equipo coincidía en que debían contar la historia en una multiplicidad de ciudades con estilos bien disímiles. Desde Tánger hasta Budapest, la película atraviesa los paisajes más diversos, anclados de una manera u otra a la trama y el personaje.
Un refugio en Noruega, Un encuentro clave en Budapest
La producción eligió los paisajes mágicos de Noruega para mostrar el refugio que elige Natasha tras infringir los Acuerdos de Sokovia y ser perseguida. La película se filmó dos días en un pueblito pesquero llamado Sæbø y luego en el valle de la carretera de Trollstigen.
«Elegimos Noruega porque nos daba estos vastos paisajes y esa naturaleza reflejaba muy bien el lugar en el que estaba Natasha en su vida y que era para ella un punto de inflexión«, cuenta Jamie Lengyel, el supervisor de gestión de locaciones.
Budapest, en tanto, tiene gran peso narrativo en la historia y era un destino obligado para la producción.
«Creo que Natasha está perturbada. Tiene una fuerte sensación de fatalidad. Hay asuntos pendientes y una culpa que la atormenta, y todo parece tener su origen en lo que pasó en Budapest. La película no es sobre lo que pasó en Budapest, pero ayuda a entender el peso que carga Natasha y qué es lo que la agobia. Nos dio un muy buen punto de partida para mucho de lo que sucede en la película«, relata Scarlett Johansson.
Además, en esa ciudad tiene lugar uno de los encuentros más trascendentes de la película: el de Natasha con su hermana Yelena (Florence Pugh), a quien no ve hace veinte años.
El rodaje incluyó el exterior de la casa de Budapest, en donde Natasha se reencuentra con Yelena, además de la persecución subsiguiente de Yelena y Natasha por parte de las Widows asesinas.
La producción filmó dos semanas en Budapest, desde las calles de la ciudad hasta los techos del antiguo Palacio de la Bolsa. Las locaciones incluyen también la estación del ferrocarril Budapest-Keleti(este), la estación de subterráneo Budapest-Nyugati (oeste) y una gasolinera en donde Natasha y Yelena se recuperan después de la persecución.
Una misión en Tánger, una familia en Atlanta
La producción también se trasladó a la ciudad marroquí de Tánger, donde se filmaron escenas junto a Florence Pugh en las que Yelena lleva a cabo una compleja misión.
Para el diseñador de producción Charles Wood, rodar en Tánger brindó la escala necesaria para la secuencia. «Nos pareció que teníamos que filmar en exteriores en una ciudad como esa para que diera la dimensión, la textura y la historia apropiadas«, dice.
Por otra parte, Atlanta fue la ciudad elegida para recrear el suburbio de Ohio en el que Natasha vivió durante tres años en una estructura familiar fabricada, con padres espías y una hermana menor. Una calle local en Chamblee brindó el aspecto apropiado de la arquitectura de la década del noventa para las tomas de exteriores.
Reino Unido, Camaleónico
Como la producción de Black Widow tenía base en los Pinewood Studios, en las afueras de Londres, el departamento de locaciones encontró en el Reino Unido varios espacios para recrear escenarios de distintos países.
La reserva natural Hankley Common, en Surrey, hizo de la región silvestre rusa, brindando el gran paisaje que rodeaba la granja de Melina (Rachel Weisz), al tiempo que unas barracas militares cercanas se transformaron para convertirse en el exterior de la casa rural.
El aeródromo de Dunsfold sirvió como un campo de aviación de Ohio, y el RAF Upper Heyford Park se convirtió en un aeródromo cubano. Un puente en Escocia, por último, se transformó en un lugar clave de Noruega en donde Natasha se encuentra con Taskmaster por primera vez.
El Universo de PineWood Studios
La construcción de los 64 sets de filmación de BLACK WIDOW en Pinewood Studios involucró el trabajo de un equipo de artistas y técnicos que creó escenarios tan disímiles como la misteriosa Habitación Roja, la casa de la familia de Natasha, el departamento de Yelena en Budapest, la prisión de Gulag y más.
También se construyeron sets adicionales en Cardington Studios, a unos 80 kilómetros de Londres.
Las secuencias de la casa de la familia de espías muestran un punto de inflexión importante en la historia de Natasha, al mismo tiempo que presenta a personas clave de su pasado.
La casa está diseñada para imitar una clásica casa de familia estadounidense, completa con una curiosa colección de fotografías, que es una parte importante de su identidad falsa, y un puñado de luciérnagas agregado con efectos visuales.
Otro escenario que se construyó fue el puente en el que Natasha y Taskmaster se enfrentan en una batalla, cerca del escondite de Natasha en Noruega.
Los realizadores encontraron lo que buscaban en el puente Ballachulish, en Escocia, pero cerrar un puente muy transitado durante semanas no era factible, sin contar los efectos especiales necesarios para la escena.
Por lo tanto, un tercio del puente fue reproducido en Cardington Studios, y el equipo de efectos visuales creó el resto con imágenes generadas por computadora.
El departamento de Yelena en Budapest, en tanto, presentó al equipo el desafío de crear una serie de habitaciones a través de las cuales pudiera fluir la cámara. Además, se trabajó con especial cuidado la iluminación.
«Dejamos que la luz entrara en las áreas de actuación por las ventanas y desde lo más lejos posible de los sets. Esta luz que proviene de una sola fuente se refracta a través de las ventanas de los espacios, invadiendo el plató lo menos posible. La iluminación tiene un aspecto único y muy natural«, explica el director de fotografía Gabriel Beristáin.
El plató más grande que se construyó fue el de la prisión de Gulag, que se hizo en los exteriores de Pinewood.
«El diseño se basó en un viejo reactor nuclear –dice Wood–. Tiene que dar la impresión de ser un lugar reconvertido, una vieja central nuclear soviética que cayó en desuso con los años y ahora aloja a estos peligrosos prisioneros«.
Por último, el equipo unió esfuerzos para dar vida a la icónica Habitación Roja, el misterioso y controvertido programa de entrenamiento de espías de las Widows.
Como su ubicación real es desconocida -ni siquiera Natasha sabe dónde está- los diseñadores se aseguraron especialmente de que, desde el punto de vista de la audiencia, no se pudiera saber dónde estaba ubicada.
«Queríamos crear un mundo que estuviera basado en una época anterior. En nuestra historia, la Habitación Roja fue construida en la época de la carrera espacial, en los años sesenta. Le dimos un aspecto retro con muchas referencias arquitectónicas de los sesenta, los setenta y comienzos de los ochenta«, completa Wood.