Cada vez más instituciones del Perú apuestan por el enfoque STEAM en la primera infancia. A través de herramientas lúdicas como la robótica educativa, niñas y niños desarrollan habilidades clave para el siglo XXI desde sus primeros años.
Las instituciones no solo utilizan la educación STEAM, también usan recursos como la robótica para desarrollar pensamiento lógico, creatividad, autonomía y trabajo colaborativo en los más pequeños.
“Aplicar STEAM en la infancia no es solo usar tecnología, es formar grandes pensadores desde los primeros años, sembrar curiosidad, liderazgo y capacidad para resolver problemas”, señala Lourdes Zeballos, gerente general de Intecnia STEAM Education, entidad que acompaña a docentes y escuelas en este proceso.
En el I.E.P. Santiago Alberione, la docente Rosa Guevara trabajó con el Tale-Bot Pro en su aula de 5 años. Los resultados fueron notables:
“Los niños se concentraban, tomaban decisiones y trabajaban en equipo. Surgieron líderes naturales, niños que dirigían sin mi intervención. Incluso quienes eran emocionalmente inseguros ganaron confianza al ayudar a sus compañeros. El Tale-Bot Pro los motivó, los hizo sentirse capaces”, comentó.
Esta experiencia refleja una tendencia creciente: la robótica no solo enseña programación, sino que fortalece habilidades socioemocionales. En grupos pequeños, los niños dialogan, llegan a acuerdos y aprenden a expresarse, mientras resuelven retos de forma lúdica.
“El juego se convierte en un motor de aprendizaje. Cuando un niño programa un robot, también está construyendo autoestima, empatía y pensamiento crítico”, agrega Zeballos.
Este cambio no sería posible sin un acompañamiento pedagógico adecuado. Intecnia STEAM Education brinda capacitación, asesoría y materiales adaptados para docentes, facilitando la integración de STEAM en la malla curricular de inicial de manera contextualizada.
Gracias a iniciativas como esta, el enfoque STEAM deja de ser una promesa para convertirse en una realidad tangible en la educación peruana.