Para muchos padres les resulta difícil enseñar algún idioma a sus hijos, ya que ellos tienen una manera diferente de comprender y recepcionar información. Para que los niños aprendan una nueva lengua se requiere de creatividad y dinamismo.
En este contexto, Alex Sauter, sub gerente de Gestión Docente del Instituto Cultural Peruano Norteamericano (Icpna) brinda algunos consejos para enseñar inglés a los niños desde casa.
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Ver dibujos animados en versión original. Se trata ver las series o dibujos animados preferidos en la versión original. Debes evitar los subtítulos, lo que nos interesa es que relacione las imágenes con los sonidos, ritmo y acento del idioma. Así los más pequeños no solo disfrutarán de un rato de ocio, sino que sin darse cuenta aprenderá inglés.
Leer cuentos en inglés antes de ir a dormir. Para enseñar inglés a niños en casa, una de las mejores herramientas son los cuentos ya que los perciben como historias que les ayudan a avivar la imaginación y estimulan su curiosidad. De esta manera, descubren nuevas palabras, que por supuesto recordarán mejor gracias a la estrecha relación entre ellas y los personajes de ficción.
Utiliza apps y juegos en inglés para niños. Usar la tecnología para implementar el aprendizaje del inglés conecta con niños que son nativos digitales. Esta les hará sentirse cómodos y sentirán que no están esforzándose por aprender, sino que es parte de un juego. Entre las aplicaciones y juegos para familiarizarse con el inglés están Easy Peasy, Fun English, Lingokids, entre otros.
Escuchar y cantar canciones en el idioma. Las canciones son un instrumento muy valioso en el aprendizaje. Permiten ir conocer el idioma y reconocer palabras, además de favorecer el trabajo en la entonación, el sonido y el acento. Si además se usa música para niños se generará un clima de diversión y se estimularán más los sentidos.
Conversaciones básicas en el hogar. Si los padres tienen una buena base en el idioma, recomendamos que mantengan conversaciones en inglés con sus hijos. Pueden preguntarles qué han hecho en clase, sus colores favoritos o cualquier cosa que les ayude a utilizar el vocabulario que practican en clases. Es una manera perfecta de reforzar lo aprendido.
