El teléfono móvil se ha convertido en un accesorio importante para muchas personas, por lo que hay que tener cuidado de que no sea infectado por algún malware. Muchos usan los celulares para tomar fotos, enviar y recibir correos electrónicos, gestionar billeteras digitales, entre otros, lo que atrae a los ciberdelincuentes.
En este contexto, ESET menciona cómo puede un smartphone infectarse con un malware para así evitar ser víctimas de alguna amenaza.
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Mediante aplicaciones de mensajería, SMS o redes sociales se envían mensajes de phishing que contienen enlaces o archivos adjuntos maliciosos. Una vez que la víctima descarga el el archivo adjunto y lo instala en su dispositivo, ese malware permite a los actores maliciosos llevar a cabo sus acciones maliciosas.
En estos sitios fraudulentos los ciberdelincuentes se hacen pasar sitios de marcas u organizaciones conocidas e incluyen enlaces maliciosos para la descarga de malware.
Aplicaciones falsas que se hacen pasar por apps legítimas. De esta manera los atacantes logran que víctimas desprevenidas descarguen en sus dispositivos programas malicioso como keyloggers, ransomware o spyware. Estos están disfrazados de apps de seguimiento de fitness o aplicaciones de criptomonedas. Estas aplicaciones generalmente se difunden a través de tiendas de aplicaciones no oficiales.
“Los signos más comunes de que un dispositivo ha sido comprometido son que la batería se agota más rápido de lo habitual y experimenta picos en su uso de datos de Internet. Aunque sus hábitos de navegación no han cambiado, su función GPS o Internet (ya sea Wi-Fi o datos móviles) se puede habilitar o deshabilitar por sí mismo. Y se abren ventanas emergentes que despliegan anuncios o aplicaciones desconocidas sin que el usuario lo autorice.”, dice Lukas Stefanko, Investigador de malware de ESET.
Otra señal de que nuestro smartphone pueda tener un código malicioso es que las apps que anteriormente funcionaban bien comienzan a exhibir un comportamiento extraño. Esto incluye iniciarse repentinamente, cerrarse o fallar por completo, y mostrar errores inesperados. Incluso, el propio equipo móvil puede comenzar a comportarse de una manera extraña.
También se puede notar la presencia de malware cuando el usuario o sus contactos reciben llamadas o mensajes extraños, o que el historial de llamadas y mensajes tengan registros desconocidos. Esto se debe a que el código malicioso intenta hacer llamadas o mandar mensajes a números internacionales premium. Otra señal evidente es que si el teléfono está comprometido simplemente se bloqueará.
¿Qué hacer si el teléfono fue infectado?
Hay dos maneras de eliminar la mayoría de los tipos de malware de un celular, este puede ser automática y manual. La primera es descargar e instalar una solución antivirus en el smartphone, pero este debe tener buenas referencias. La eliminación manual también es posible, pero más complicada. Esto porque el virus tiene mecanismos de prevención codificados para evitar o dificultar que los usuarios logren desinstalarlo.
Ante esta situación, ESET comparte algunos puntos preventivos y proactivos que contribuirán en gran medida a mantenerse a salvo de las amenazas.
-Actualizar tanto el Sistema operativo como las aplicaciones, tan pronto como estén disponibles las últimas versiones.
-Realizar backup de los datos y guardar esta copia de seguridad de forma segura. Será de gran ayuda en caso de que el dispositivo se vea comprometido.
-Para protegerse de la mayoría de las amenazas, utilizar una solución de seguridad móvil que tenga un historial comprobado de buena reputación.
-Descargar aplicaciones solo de las tiendas oficiales Google Play y App Store, y siempre asegurarse de verificar las opiniones, tanto de la aplicación como de su desarrollador.
-Tener en cuenta las tácticas comunes que utilizan los ciberdelincuentes para infiltrarse y comprometer los dispositivos.
